¿Ejercer, educar y/o emprender?

Una pregunta esencial que debes hacerte desde que estás estudiando. ¡Empieza este nuevo año planificado!

Alguna vez te has preguntado dónde quieres trabajar cuando termines de estudiar, si estás estudiando lo correcto para tus planes futuros, o si tienes planes futuros con lo que estás estudiando.  Sería un éxito saber todo esto desde antes de comenzar tu carrera. Mi trabajo de sueños era ser médico, pero al descubrir la Química, no llegué al segundo año de bachillerato.  Fue entonces que el teatro y el cine me dieron una perspectiva que se convertiría en la piedra angular de mi futuro. El trabajo en equipo es la clave de alcanzar el éxito en cualquier grupo, compañía u organización. Podríamos planificar una obra o un cortometraje al detalle pero a fin de cuentas lo que lo enriquece el proyecto es el trabajo colaborativo de un equipo de trabajo; así sean 3 personas. Esta experiencia llevó a crear con un maravilloso equipo de cuatro jóvenes trabajadores (incluyendo a Gabriela Avilés) el primer grupo de cine de la UPR Ponce. Ahí descubrimos los primeros retos de todo emprendedor: si el concepto no existe, ni ha existido, le toca la tarea de crear las bases del negocio desde cero y lo único que puede contar es su propio deseo de superación. De hecho, en la universidad no se ofrecen cursos de cine, tuvimos la tarea de crear la cultura cinematográfica e involucrar a los integrantes en un proceso de onboarding para tuvieran el conocimiento básico de lo que se trabaja en las filmaciones. Importante, todo este trabajo requiere de personas con un compromiso que lo mueva la visión de la organización. Al final del segundo año de fundada alcanzamos a desarrollar sobre 7 cortometrajes de entre 5 a 15 minutos cada uno y participado de una competencia de cortometrajes europeos a nivel isla, en 2 ocasiones, donde alcanzamos los mejores 10 cortometrajes de la competencia (fueron sobre 30 competidores). Si desean, luego le compartimos el proyecto.

No perdamos el enfoque. Es esencial ejercer y desarrollar tu especialidad en una empresa que exista; pero también es esencial tener una mentalidad abierta a emprender y crear tu oportunidad con tu visión y enfoque.  Sin embargo, para emprender, primero hay que prepararse en el tema y desarrollar tu concepto de negocio en base a lo que falte. Reconocemos que toda persona que comienza a estudiar debe tener en mente 10 elementos esenciales:

  1. ¿Cuánta demanda en el mercado tiene lo que vas a estudiar? 

Cuántas plazas están solicitando, hacia qué dirección está moviéndose la concentración que estás estudiando, investiga un poco en indeed y otras páginas de reclutamiento a ver como va la esperanza de tu interés ocupacional.

2. ¿Cuánto cobra una persona en un puesto o en una de las concentraciones de lo que va a estudiar? 

Muchas veces una misma concentración tiene varias especialidades, sobretodo en bachillerato, asegurate de saber cuánto se gana una persona en un puesto dentro de las concentraciones que quieres abarcar)

3. ¿Cómo vas a implementar lo aprendido?

En qué eres excelente, cómo puedes combinarlo para ser un profesional altamente competitivo.

4. ¿Está alineado a tus destrezas y habilidades?

No te avergüences de tomar una prueba vocacional, de hecho, todos deberíamos tomar la prueba para tomar la decisión más acertada. Si en tus intereses vocacionales aparecen dos fortalezas, quizá puedas desarrollar de esos resultados un plan A y un Plan B o combinarlas en un concepto de negocio mixto.

5. ¿Qué es lo que más vas a utilizar de cada curso en tu contración? 

Cada vez que comienza un curso ya sea en línea o en la modalidad de tu preferencia; te entregan un prontuario de temas. Asegurate de orientarte y googlear bien sobre los beneficios y la aplicabilidad que tiene esa clase a tu escenario de trabajo futuro y de qué temas vas a hacer millones de preguntas.

6. ¿Hacia dónde se dirige el futuro de tu concentración? 

Si te gustan buscar soluciones y  dicen que probablemente sea irrelevante el puesto que te interesa en el futuro, ¿cómo lo transformarías?

7. ¿Qué otros cursos necesitas para llegar a la meta que aspiras una vez te gradúes?

A veces tus intereses con tu profesión sobrepasan el curriculo o las ofertas académicas. Muchos puestos exigen experiencia con ciertos programas de computadora o destrezas,. Busca cuales son las destrezas, orientate y educate extracurricularmente. Esto te vuelve mucho más competente a la hora de graduarte.

8. ¿Puedes adelantar algunos conocimientos antes de terminar? 

Verifica a tu alrededor. La universidad tiene la tarea de prepararte con las mejores herramientas, al menos así se mercadean. Deben haber varias organizaciones estudiantiles en el recinto que te van a ayudar a formarte y conocer un poco más de tu concentración. Además que en un Resumé se ve muy elegante ser una persona líder en tu preparación y desarrollo profesional (que incluye la universidad, por si no la considerabas). Existen también Certificaciones, cursos en línea, conversatorios, convenciones (AL MENOS UNA debes disfrutarla), seminarios, entre otros.

9. ¿Algún profesor ejerce una especialidad que te gustaría?  Si es así, ¿es accesible? 

Muchos profesores son abiertos a tu desarrollo extracurricular, aunque en las clases te pidan trabajos que te quiten horas de sueño. Creeme, no recuerdo un profesor al que invitara a un café que no estuviera en la disposición de reunirse, aunque tuviera que reacomodar la fecha de la charla. Todos deberíamos tener al menos un profesor apadrinado al que admiramos. 

Y muy importante

10. ¿Qué llevó a tu profesor a ejercer como docente (profesor)?

  • Esta pregunta parecería invasiva. CUIDADO, debes realizarla con humildad, respeto y en el momento adecuado (si la piensas hacer). Muchos profesores tienen diversas razones. Quizá su vocación es educar o le funcionó para complementar otras necesidades económicas. Lo que necesitas saber es sólo la experiencia del profesor, en la conversación va a surgir el tema y esto te dará información valiosa sobre cómo ejercer en tu profesión y es una excelente alternativa a considerar para seguir fomentando el desarrollo de la profesión y tu educación continua.

Siempre que tengas un espacio entre curso y curso o hasta durante el aprendizaje comienza a diseñar cómo y dónde te visualizas en tu profesión y qué potencial le ves a algunos temas en específico. Te recomendaría tener una libreta aparte, un portafolio y un folder en google drive que uses todo tu bachillerato y le pongas un título: Futuro, Viajes Intercursarios, Ideas, Interesante. Ahi vas a apuntar todo lo que preguntas por curso, las respuestas, los documentos que te compartan, los prontuarios con las referencias y bibliografía(esas son tu base de datos una vez te gradues) y todos los certificados de participación que tengas. Suena tedioso, pero esto va a marcar la diferencia del resto de tus compañeros y va a darte una idea más clara de tu propósito con tu profesión.

En el próximo blog hablaremos de cómo crear tu dream-team de trabajo desde tu formación académica.